Un par de científicos Noruegos acaban de desarrollar lo que según dice el artículo fuente es la primera pieza de hardware que evoluciona por su cuenta para encontrar la mejor solución a un problema determinado (lo cual no es 100% cierto ya que al menos una década atrás recuerdo haber leído de cosas similares en laboratorios).
Este nuevo sistema básicamente hace en hardware (es decir, a nivel de componentes electrónicos) lo que antes se hacía en software (es decir, simulado con un programa de computadora), y es que el hardware evoluciona utilizando genes sintéticos para encontrar, por medio de millones de combinaciones genéticas, la mejor solución a un problema que se le presente.
Esto es, en otras palabras, otro gran paso para lograr una verdadera Inteligencia Artificial (I.A.), pues personalmente no creo que al menos por ahora podamos crear una verdadera I.A. sin diseñar en esta algún tipo de mecanismo de auto-adaptación (sea basado en modelos genéticos, en redes neuronales, o ambos).
Para que tengan una idea de lo rápido que esta nueva máquina prueba mutaciones, lo hace a un ritmo en donde cada segundo equivale a sobre 800,000 años de evolución humana. Esto también nos debe dar una idea a qué ritmo progresará la mente de una máquina cuando sea la primera en llegar a ser una verdadera I.A.
El equipo ahora planea utilizar esta técnica para crear robots que ayuden en la instalación de tuberías para la extracción de petroleo a profundidades que rondan los 2,000 metros, ya que hoy día ese trabajo es casi imposible ya que requiere de entre 2 a 3km de cable para comunicarse con el robot. La idea es crear un robot que se adapte por su cuenta y que «invente» una manera de comunicarse con la superficie que sea mucho más eficiente que la manera actual.
vía | eliax