Desde luego, hay que reconocer el ingenio de este pequeño invento: con dos botellas de refrescos (podemos escojer el color que más nos guste, o combinar varios), una cremallera para el cierre, y un poco de pegamento de contacto ya tenemos un objeto perfecto para hacer un regalo o para guardar nuestras monedas, joyas, etc.
Ecológico (debemos reutilizar!!), muy fácil de realizar, muy barato y además muy bonito.
vía | neomansland