Hubo vida después del Napster de pago, y también la habrá después de eMule en el caso de que sea necesario. La empresa española MP2P Technologies ha presentado Omemo, un sistema que aún está en pruebas y que cambia la forma de intercambiar archivos. Su creador, Pablo Soto, es un viejo conocido para los defensores de la cultura compartida. Fue el joven talento creador de Blubster, el considerado como el programa español más distribuido de la historia de internet.
Omemo es un programa con el que los usuarios comparten una sección de su disco duro. En él se pueden colocar los contenidos que se desea compartir con otros usuarios de Omemo, y el resto hará lo mismo por su cuenta. Cuando alguien decide compartir obtiene una especie de ‘derecho de escritura’ con capacidad casi ilimitada para archivos multimedia. También la posibilidad de lectura de todos los contenidos que han compartido el resto de los usuarios.
Se puede acceder así a millones de espacios con millones de archivos. Como novedad, cuando la persona que comparte el archivo se desconecta, el archivo no deja de compartirse, porque en realidad es como si el usuario ya sólo tuviese un acceso directo, y no el archivo original. Por otro lado, nadie puede borrar el contenido, sobre el que sí se puede votar.
El sistema se muestra como si fuese una unidad virtual y no hay forma de saber quién subió qué archivo, ni siquiera qué paquetes de información son los que tiene alojados en la parte del disco duro que cedió a Omeno. Complejo pero sencillo, ése es el resumen. Su rareza no proviene más que de la protección que se ha otorgado tanto al propio sistema como a los usuarios que forman parte de él, huyendo de posibles cierres. Lo único que no cabe en este inmenso disco duro virtual es el ánimo de lucro.
vía | Como pez en el agua