El trabajo de Sam Jinks recuerda enormente a los trabajos, también hiperrealistas, de Ron Mueck, de quien ya hemos hablado en wizinga.
Con sus esculturas, realizadas en silicona con un dominio técnico impresionante, el artista australiano recrea una naturaleza humana dura, desnuda y un tanto terrorífica. Son piezas no sólo para contemplar, sino también para reflexionar mirándolas…